Hechos 1

La promesa del Espiritu Santo. 

Y estando juntos, les mandó que no se fueran de la ciudad, sino que esperasen la promesa del Padre, la cual, les dijo, oístes de mí. Hechos 1 :4

Este pasaje es uno de los más importantes no solo de la biblia, sino en la historia de la humanidad, porque fue el origen de un gobierno espiritual sobrenatural en la tierra.

En el A. T ya existía el reino pero este operaba de una forma distinta, porque el Espíritu de Dios estaba activo solo en los profetas o siervos especiales en algún momento, mientras que desde el evangelio toda la plenitud de la deidad ya se encontraba en Jesús, (la presencia de Dios se expandió del templo haciéndose verbo, habitando entre  nosotros) y todo ese tiempo de su ministerio predicó acerca de lo que vendría, entre ellos _un Espíritu que les consolaría y sería el autor de la valentía para que diesen testimonio de todo lo que habían visto y oído; para un gran fin: La instauración de SU IGLESIA. 

La antesala a la instauración de la iglesia con las señales fue lo que Jesús les habló en Lucas 24: 49

Y he aquí yo enviaré sobre vosotros la promesa de mi Padre, pero vosotros permaneced en la ciudad, hasta que seáis investidos con poder de lo alto, y el otravez les confirmó en esos 40 días, donde se les apareció a sus díscipulos, y a más de 500 personas que fueron envestidos primero en conocimiento, luego en revelación y por último en poder, todo por medio del E.S. 

El ministerio de Jesús finalizó transmitiendo las últimas instrucciones antes de su partida, y también les dió pruebas convincentes de que el había resucitado con la finalidad de que no hubiese dudas entre ellos.; así dió paso al ministerio del Espíritu Santo en nosotros.