Profundidad

 Vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios, atravéz de Jesucristo. 1 Pedro 2: 5

La piedra angular.

En las escrituras encontramos que la piedra angular describe a Jesús. 

La piedra angular desde los primeros tiempos donde se iniciaban las edificaciones fue una piedra sólida, mejor elaborada porque es la piedra principal que se colocaba en una esquina, que servía como base para determinar cada medida en el resto de la construcción, todo se alineaba con ella una vez que fuese puesta.  Entonces todo tiene sentido al decir que Cristo es la piedra principal, especialmente cuando al hablar sobre dos argumentos en el que se basa. Primero señala a Jesús como desechado por los religiosos de esos tiempos que eran los fariseos, saduceos, y otros lideres religiosos. Mientras que también comentaristas dicen que Dios les proporciono una piedra junto al camino por el cual muchos tropezaban, que los edificadores habían sacado, pero después fue esencial en la construcción del templo.

Entonces comenzó Jesús a decirles por parábolas: Un hombre plantó una viña, la cercó de vallado, cavó un lagar, edificó una torre, y la arrendó a unos labradores, y se fue lejos. Y a su tiempo envió un siervo a los labradores, para que recibiese de estos del fruto de la viña. Mas ellos, tomándole, le golpearon, y le enviaron con las manos vacias. Volvió a enviarles otro siervo; pero apedreánole, le hirieron en la cabeza, y también le enviaron afrentado. Volvió a enviar a otro, y a este mataron; y a otros muchos, golpeando a unos y matando a otros. Por último, teniendo aún un hijo suyo, amado, lo enviĺ también a ellos, diciendo: Tendrán respeto a mi hijo. Mas aquellos labradores dijeron entre sí: Este es el heredero; venid, matémosle, y la heredad será nuestra. Y tomándole, le mataron, y le echaron fuera de la viña. ¿ Qué, pues, hará el señor de la viña?

Mas aquellos labradores dijeron entre sí: Este es el heredero; venid, matémosle, y la heredad Vendrá, y destruirá a los labradores, y dará su viña a otros. Ni aun esta esctitura habéis leído:

La piedra que desecharon los edificadores ha venido a ser cabeza del ángulo; El Señor ha hecho esto, y es cosa maravillosa a nuestros ojos? y procuraron prenderle, porque entendían que decía contra ellos aquella parábola; pero temían  a la multitud y dejándole se fueron. Marcos 12

En el nuevo pacto, Jesús es el fundamento desde donde se levanta toda la iglesia, es decir que todos los seguidores formamos un templo espiritual, donde somos edificados, y transformados por el sacrificio perfecto del cordero, y desde esa posición somos llamados también piedras vivas, porque según las escrituras los mandamientos no están más muertas en la piedra por Moisés, sino escrita en nosotros por el Espiritu Santo. Hebreos 10: 6 dice: Pondré mis leyes en sus corazones y en sus mentes las escribiré.