La vida despues

 Un vaso de jugo de durazno en la mano, sentada en un arenal; hojeadas a un libro inspirado en Jesús, el cabello al song del viento, con una calma profunda en un lugar muy lejano, se debe sentir la vida misma.

Nosé que concepto tendré entonces sobre el miedo, tal vez no signifique nada, o tal vez siempre existirá ese sentimiento de inseguridad hacia lo que me rodea. Sé, que mientras exista un nuevo día, algo va a cambiar, espero que todo lo que venga sea para bién, o que exista mejores respuestas, marcado por las manecillas del tiempo. Solo fue un mal sueño, ahora vives libre, y estas donde solías pensar, percibiendo los colores del cielo en un amanecer de abril.

En una de esas de esas líneas lees: aquí estoy, como siempre -. Respiras, sonríes, todo es más ligero, sabes que quién te llevo hasta ahí, es la voz que hacía ecos sobre el agua, desde el principio.