Confraternidad.

 Estaba viendo un post que decía; Dios hizo a la iglesia parte de su misión y no viceversa. Porque existe una idea de que la iglesia creó la misión, pero teológicamente podemos ver que Dios no improvisa, su plan fue desde siempre crear, transformar, sanar y levantar a sus criaturas. Lo hizó principalmente por la obra de salvación en Jesús, despues nos hizo parte de sus pensamientos, dandonos la oportunidad de conformar iglesias para seguir su guía. Esta perspectiva nos lleva a ver de la forma correcta nuestra posición como hijos de Dios en el mundo. Desde este enfoque nos damos cuenta que somos privilegiados por que tenemos la oportunidad de que Dios nos de un espacio en sus propósitos. 

Personalmente es una enseñanza que había aprendido, cuando los jóvenes haciamos confraternidad con otros hermanos en sus iglesias una vez al mes, para organizar y compartir el proyecto de las misiones. Ahí nos edificabamos unos a otros desde un mismo sentir y propósito, con un enfoque celestial. 

Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios; por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a él. Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es. Y todo aquel que tiene esta esperanza en él, se purifica a sí mismo, así como él es puro. 1Juan 3.1, 3

El amor de Dios nos atrae hacia El, a la renovación espiritual constante, y a ser parte de sus propósitos. Esta esperanza nos lleva a la confraternidad, para hacer la obra de evangelismo y discipulado en cualquier lugar donde nos encontremos, hasta el fin de nuestros días porque somos parte de su misión y eso es suficiente para tener una identidad. 

Dios es el único Dios. Él es Dios sobre todo y sobre todos los que existen. Él no es el Dios solo de ciertos grupos o ciertas regiones del mundo. Todos los que le adoran y le sirven se unen como uno solo. Tenemos fe en que el Espíritu Santo vive dentro de cada uno de nosotros. Todos tenemos la misma esperanza sobre lo que Dios hará en el futuro. Todas estas cosas que los creyentes tenemos en común nos unen. Estamos tan estrechamente unidos entre sí que somos como un solo cuerpo. Este cuerpo se mantiene unido por medio de la paz que da Jesús. Se mantiene unido por medio de la verdad y el amor. Todos los creyentes debemos hacer la obra que Jesús nos ha dado. 

Permanece firme en tu identidad y avanza con el poder del Espíritu Santo. Eres parte de su misión. ¡Dios te bendice!

I was reading a post that said: God made the church part of his mission, not vice versa. There is an idea that the church created the mission, but theologically we can see that God does not improvise; his plan has always been to create, transform, heal, and lift up his creatures. He did this primarily through the work of salvation in Jesus, then made us part of his thoughts, giving us the opportunity to form churches to follow his guidance. This perspective leads us to see our position as children of God in the world in the right way. From this approach, we realize that we are privileged because we have the opportunity for God to give us a place in his purposes. 

Personally, this is a lesson I learned when we young people would fellowship with other brothers and sisters in their churches once a month to organize and share the mission project. There we built each other up from the same heart and purpose, with a heavenly focus. 

See what love the Father has given us, that we should be called children of God; that is why the world does not know us, because it did not know him. Beloved, we are God's children now, and what we will be has not yet been revealed; but we know that when he is revealed, we will be like him, for we will see him as he is. And everyone who has this hope in him purifies himself, just as he is pure. 1 John 3:1, 3

God's love draws us to Him, to constant spiritual renewal, and to being part of His purposes. This hope leads us to fellowship, to do the work of evangelism and discipleship wherever we are, until the end of our days, because we are part of His mission, and that is enough to give us an identity. 

God is the only God. He is God above all and above everyone who exists. He is not the God of only certain groups or certain regions of the world. All who worship and serve Him are united as one. We have faith that the Holy Spirit lives within each of us. We all have the same hope for what God will do in the future. All these things that believers have in common unite us. We are so closely united with one another that we are like one body. This body is held together by the peace that Jesus gives. It is held together by truth and love. All believers must do the work that Jesus has given us.

Stand firm in your identity and move forward with the power of the Holy Spirit. You are part of His mission. God bless you!